4.8.12

Lástima, éramos un buen invento

Ellos amputaron
tus muslos de mi cadera.
Cuando se trata de mí
todos son cirujanos.
Nos desarmaron
uno del otro.
Conmigo siempre son ingenieros.
Lástima. Éramos un buen invento
amoroso: un avión hecho de hombre y mujer,
con alas y todo.
Fue poco lo que pudimos despegar del suelo,
pero volamos.

2 comentarios:

Gabriela dijo...

muy bueno che

Ariel Guallar dijo...

Aterrizaste en el parque aereo, gab! con este poema me tomé el permiso de cambiarle el final. Y queda mejor, pues decía: "Poco volamos"... abrazo!