ni pretendas saber
-pues no está permitido-
el fin que a mí y a ti, Leucónoe,
nos tienen asignados
el fin que a mí y a ti, Leucónoe,
nos tienen asignados
los dioses.
Mejor será
aceptar lo que venga.
Mejor será
aceptar lo que venga.
Ya sean muchos los inviernos que Júpiter te conceda
o sea éste el último
que ahora el mar Tirreno rompe
contra acantilados opuestos.
No seas loca, Leucónoe, liba tus vinos
y adapta al breve espacio de tu vida
una esperanza larga.
Mientras hablamos, huye el tiempo envidioso.
Vive el día de hoy. Captúralo.
No te fíes del incierto mañana.
Versión: HEN
No hay comentarios.:
Publicar un comentario